domingo, 25 de septiembre de 2011

TODO y NADA.

Y un día, me di cuenta de que algo había cambiado. Algo, no sabría decir con palabras lo que sentía en ese momento. Pero tampoco podría decir mucho más ahora. Solo que era algo especial, algo raro. No sé,.. algo distinto de todo lo que antes había sentido. Una sensación nueva. Y aunque en aquel momento no sabía lo que era, me gustaba. Me veía con más ganas que nunca de conseguir todo lo que me propusiera en ese momento. Lo más extraño de todo esto no era que fuera algo nuevo, si no que esa alegría se desvanecía en un preciso momento. El momento en el que me bajaba de aquel bus. En ese momento, sentía como todas aquellas emociones nuevas iban desapareciendo.. y aparecía una distinta, esta si que la conocía. Deseaba que pasaran rápido las horas para poder irme a la cama y que el tiempo estuviera de mi parte y amaneciera enseguida, y así poder volver a sentir aquel sentimiento que me gustaba tanto. Y así fueron pasando los días, las semana y los meses. Y aquel sentimiento se fue haciendo cada vez más intenso, y cada vez me gustaba más. Hasta que llego un día en el que me di cuenta de lo que era al oír aquellas palabras. Aquellos días ya no sentía alegría, aquello era mucho más que eso. Y no podía parar de sonreír, era inevitable. Aunque al poco tiempo todo cambió, y esas sonrisas se convirtieron en lagrimas. Aunque aquel sentimiento nuevo que había descubierto nunca me abandonó. Ha pasado ya casi todo el verano y todas aquellas emociones no me han abandonado en todo este tiempo.
" Por pedir pediría 24 horas a tu lado en las que nos diera tiempo a todo menos perder el tiempo [...], [...]porque y solamente eres la razón de mi existencia. [...] Ves, hasta lo he escrito: <<Tengo ganas de ti>>".
                                              

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